martes, 24 de julio de 2007

La ciencia de los colores.

El color no existe, en realidad el color es un efecto producido por la combinación de tres elementos: la luz, un objeto que la refleja y un aparato visual compuesto de un ojo y un cerebro que interpreta la información de la luz reflejada. por eso no sabemos con certeza de qué color son las cosas; lo único que se puede decir es de qué color las vemos. la luz del Sol parece blanca porque es una perfecta combinación de los colores del espectro visible; esta radiación se transmite como una onda y se compone de bandas de energía cada una de las cuales corresponde a una longitud de onda determinada. Cada longitud, es decir, cada cantidad de energía dada pertenece a un color, la luz blanca se descompone en diversos colores, se puede utilizar un prisma para comprobar el espectro de colores; un prisma es un cristal que desvía la luz pero no desvía por igual a todas estas longitudes de onda, al producir diversas medidas de refracción cada componente de la luz se ve afectado de manera distinta y en consecuencia la luz blanca se descompone en todos sus colores. los colores que nuestro ojo detecta son los que reflejan los objetos de nuestro entorno, por ejemplo, cuando un objeto refleja casi toda la luz se ve de color blanco y cuando no refleja casi nada de luz se ve de color negro, entre estos extremos se aprecia los colores restantes. Se puede decir que el color es una especie de ilusión o decodificación que realizan el ojo y el cerebro. En los seres humanos y otros animales los conos son los encargados de dar color a las cosas, existen tres tipo de conos, cada uno sensible a determinado color: al rojo, azul y verde; cada cono se activa en menor o mayor grado y así produce un espectro visual, por ejemplo si se activan los conos azul y rojo pero se queda desactivado el verde el objeto se verá de color magenta, el resto de los colores es el resultado de todas las combinaciones posibles de estos tres tipos de célula; sumando todas las posibilidades el ojo humano puede detectar cerca de siete millones de colores distintos. El ojo humano es capaz de hacer esto porque presenta dos canales fotorreceptores opuestos: un presenta gama cromática rojo-verde y el otro azul-amarillo, la primera presente en los humanos y primates y la segunda la compartimos con todos los mamíferos, esto puede explicar por qué los animales ven el mundo con una riqueza cromática menor a nosotros. El color más dañino (según los científicos) es el amarillo, esto puede deberse a que refleja mucha luz y estimula más células en el ojo, podría decirse que irrita más; de hecho, se sabe que los niños lloran más en cuartos pintados de amarillo. El amarillo esta rodeado de supersticiones y además es usado en anuncios porque es el que se capta más rápidamente por el ojo: Si alguien quiere ponerse a dieta puede pintar su cocina de azul, o poner una luz azul en su cocina o refrigerador, este color parece actuar como ligero supresor del apetito, quizá se deba a que no estamos acostumbrados a ver alimentos azules o (según los psicólogos) porque los colores fríos traen paz e inhiben impulsos.